La prevalencia de asma tan alta y la ausencia de estudios sobre aeroalérgenos del aire exterior en Puerto Rico motivaron que nos preparáramos para obtener la certificación de la Academia de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI) y así poder reportar los niveles de esporas de hongos y pólenes en San Juan, Puerto Rico. Esta preparación no fue fácil ya que la certificación conlleva el tomar un examen escrito y uno práctico que consistía en hacer un recuento e identificación de pólenes que se observan en los Estados Unidos y que no se observan aquí en Puerto RIco. Fue todo un reto, pero se logró obtener la certificación que nos acredita para pertenecer a una red de 80 estaciones en Norte América que reportan mayormente pólenes, ya que menos del 5% reportan tanto pólenes como esporas de hongos incluyendo la nuestra en Puerto Rico. Nuestro primer reporte fue el 15 de mayo del 2005. Desde entonces hemos estado reportando con una frecuencia literalmente de 24/7/365, en contraste con otras estaciones que dejan de reportar durante los meses de invierno cuando no hay polen o esporas de hongos en el aire.
Hoy, 11 de mayo del 2015, nos llena de orgullo el poder haber marcado un hito en estos estudios de aerobiología, ya que somos la única estación acreditada por la AAAAI ubicada en una región tropical del mundo. Por lo tanto, el conocimiento científico que se genera desde Puerto Rico podría ser aplicable a otras áreas tropicales en las Américas, Asia o África.
Los principales logros de la estación incluyen haber ayudado en el manejo de las alergias de temporada de Puerto Rico cuando estas ocurren en forma regular durante las épocas de esporas de hongos y de pólenes. Los múltiples testimonios de nuestros seguidores en las redes sociales nos confirman la importancia de la información que proveemos para el control del asma, rinitis y conjuntivitis alérgicas. Estudios clínicos han confirmado la necesidad de desarrollar reactivos para pruebas diagnósticas y tratamiento para los aeroalérgenos de Puerto Rico, que son muy diferentes a los ya descritos en partes templadas del mundo. Para el futuro esperamos ayudar a hacer disponibles pruebas de alergias a los alérgenos tropicales.
Queremos agradecer a los estudiantes graduados que trabajaron y trabajan en nuestro laboratorio; el apoyo del Programa URGREAT-RISE de la Universidad del Este en Carolina; los colaboradores clínicos; el ingeniero Alcides Alvear de la Universidad del Turabo; al Hospital de Niños San Jorge, y al Programa RCMI del Recinto de Ciencias Médicas por financiar el equipo de nueva computadora y cámara para continuar nuestro trabajo. Igualmente agradecemos a personas que calladamente y en forma anónima nos siguen ayudando, y a los amigos virtuales de las redes sociales en las cuales participamos. Agradecemos también el apoyo de los medios de comunicación que nos han respaldado.
